Tener la misma pasión e interés por aprender, lo que en un minuto era un misterio, es lo que hace que esta carrera sea maravillosa. Uno no nace sabiendo tocar instrumentos o teniendo todos los conocimientos sobre música.
Desde hace más de 25 años que partí con lo que se convirtió en mi pasión, siempre he estado aprendiendo y eso ha sido mi motor de vida.
Comencé a trabajar en discos del programa Rojo en TVN, lugar donde aprendí mucho sobre producción musical y donde obtuve muchas experiencias que ayudaron a formarme como profesional.
En esa incursión fue que se abrió un camino y decidí ir a probar suerte en el mercado mexicano. Allí pude compartir con grandes artistas y arregladores como la banda Timbiriche, el Tri, Sin Bandera, maestros como Eduardo Magallanes, Juan Gabriel, etc.
Tener la oportunidad de colaborar con artistas hace que, tan solo con escuchar sus historias, puedas aprender y comprender muchas cosas sobre música, micrófonos, grabación, mezcla y máster.
He estado en muchos estudios y, cuando armé el mío, Mate Producciones, hice una mezcla de todo ese aprendizaje de base.
Ejemplo de estos aprendizajes: saber escuchar al artista te da señales anticipadas. Cómo hacer una grabación, qué micrófono usar, qué tesitura tiene su voz para captarlo de mejor forma, en qué posición de la sala situar el micrófono para una buena captación, qué preamplificadorusar, etc.
En Mate, leer todas esas señales hace que el trabajo sea efectivo y rápido, que la labor que hago tenga valor. Lo verdaderamente importante acá es la música. Que la magia de la música no se interfiera por el tecnicismo. Hay que sentir ese llamado “a grabar” y grabarlo.
Todos los artistas que han estado en mi estudio, como Ozuna, Becky G, Paulina Rubio, o los músicos de Luis Miguel, han entregado lecciones de cómo enfrentar cada situación que va sorprendiéndote.
Cuando partí con esta aventura, fui poco a poco creando muchas recetas que se van perfeccionando. Pero pasa el tiempo y tienes que actualizarte. Acumulas todo este aprendizaje, porque siempre aparecen más y más desafíos. No te puedes quedar siempre igual, pues eso sería un error gigante y muy limitante.
El mundo sigue, las personas cambian, la tecnología progresa y hay que ser capaz de avanzary empatizar con la música. Un ejemplo de esto es que no puedes usar una misma cadena para voces si la fuente fue captada con un micrófono u otro. Un Neumann U67 vintage pide una cadena, un Sm 58 pide otra, y puedes llegar a un tremendo sonido con los 2. Lo mismo pasa con los fierros y plugins.
La música pide y uno tiene que saber qué ofrecer. Entre más sabes, te das cuenta de que más tienes que aprender. Eso es lo que me ha dejado la experiencia dentro de la industria musical.
Reseña de autor:
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4 comentarios
Súper buena la nota, yo que estoy estudiando ing en sonido. Leer este tipo de artículos me llena el corazón.
Vamos por más conocimiento y por mantenerse actualizado. Ojalá algún día conocer mateproducciones
David un crack, en todos los sentidos posibles. Es una suerte tenerlo primero como amigo y luego poder además compartir los intereses musicales. Un Crá!
Agradecemos éste tipo de artículos y entrevistas tan humanas que nos muestran una visión de un profesional en la industria de la música, se nota la experiencia y la humildad detrás de lo que leí.
Cómo estás? Buen artículo! Cuento mi experiencia: después de años agarrándome la cabeza y poniendo más tiempo en mezclar que en lo que más me gusta componer, interpretar decidí disfrutar más con mi nueva banda, así que la grabo ‘en vivo’ solo con un condenser, y me encanta el resultado, tal vez porque así soy más feliz. Pongo acá el ejemplo https://youtu.be/qUnDXO7ELBU?si=-63VxWJqNNrlY6pQ